La
diversidad defiende las formas de pensar, sentir y desear de las personas. De
esta manera, viene a romper los esquemas, paradigmas y tabúes que
históricamente se habían establecido. Aunque éste término ha sido empleado con
frecuencia para referirse a las distintas orientaciones del deseo sexual de las
personas, incluye también las identidades de género, las diversas formas
sexuales que existen y hasta personas discapacitadas más allá de las categorías
tradicionales y excluyentes de hombre y mujer.
Es de
suma importancia el capacitarnos sobre la diversidad sexual y la diversidad de
personas ya que definitivamente esto mejora las relaciones interpersonales de
nuestra sociedad. El mejorar las relaciones interpersonales implica no criticar
a los demás, aunque no compartamos sus decisiones estamos obligados a
respetarlos. Al capacitarnos nos informamos y evitamos herir a otras personas
con comentarios o frases que muchas veces por ignorancia ni siquiera sabemos lo
que significan y las repercusiones que éstas podrían tener.
Las
personas sufren la discriminación de distintas formas y entre los errores que
más cometemos cuando nos relacionamos con personas discapacitadas o con
diversidad están los insultos, hostilidad, despido del lugar de trabajo,
exclusión comunitaria e incluso leyes que penalizan con cárcel las relaciones
sexuales entre personas del mismo sexo con consentimiento. A menudo
experimentan la discriminación en los servicios de salud y son maltratados por
la policía. Por otra parte, la discriminación y las agresiones en la escuela
provocan que muchas personas sean expulsadas o abandonen los centros
educativos, perdiendo la oportunidad de desarrollarse y conseguir empleos
formales.
Algunos
ejemplos de errores que cometemos o frases groseras que decimos son: playo, tortillera,
flor, mariposa, nos burlamos de su femineidad o masculinidad, creemos que no
tienen fuerza, no son capaces de defenderse, lloran por todo y no sienten.
Creemos que ya están acostumbrados a sentirse mal y a que la gente los ofenda.
Estamos tan equivocados respecto a este tema que hasta muchas veces ellos y
ellas se lo empiezan a creer.
En mi
opinión en Costa Rica no se tiene tolerancia a la diversidad. Es cierto que día
a día nuestra cultura respecto a este tema está cambiando y tal vez ya nos
estamos encaminando hacia una mayor tolerancia pero aún no lo hemos logrado del
todo. Ejemplo de esto son la falta de adecuaciones en instalaciones y
transporte público entre otros para las
personas con algún tipo de incapacidad. Los discriminamos y muchas veces los
mismos choferes de bus no les paran por pereza a subir la silla y no les gusta
que los ancianos no paguen. Esto me parece muy insensato ya que no recuerdan
que tienen padres, madres y hasta ellos mismos quienes algún día serán también
adultos mayores. Por otra parte, como somos un país de machistas, a las
personas homosexuales se les discrimina increíblemente y no se les permite
expresarse libremente.